Está siendo un invierno muy atípico este año en Canarias (y en Lanzarote en particular), mucho más frío de lo que estamos acostumbrados (de hecho se nos han agotado los neoprenos de 4/3 en varias tallas), también mucho más viento de lo habitual para esta época del año y eso sí, mucha ola también, no han dejado de entrar marejadas de norte, una tras otra.
En la última semana, el viento nos ha dado un poco de respiro y la fuerza ha empezado a coger un poco más de ese componente no tan norte, girando un poco más hacia el oeste, que favorece a bastantes de las principales rompientes de la isla.
